GOYAS 2016

31º Edición

 (4 de Febrero de 2017)

Director: Juan Luis Iborra

Presentador: Dani Rovira

Centro de Congresos Príncipe Felipe de Madrid 

 

Sin entrar en la valoración crítica de los premios entregados (aunque me alegro muchísimo por mi admirada Emma Suárez y su doblete y por Roberto Álamo) quiero indicar algunas cuestiones globales de la Gala:

 

1.- La gala empezó a las 22:05 y terminó a las 00:55 horas. Casi tres horas de duración y eso sigue siendo mucho tiempo.

 

2.- Como siempre se genera el equívoco con la denominación del Acto. De acuerdo que se celebra en el 2017 pero se está premiando las películas del 2016. Entiendo que sería mucho más correcto hablar de los Goyas 2016 y yo lo seguiré haciendo aunque vaya contracorriente de los Oscars, de los Goya o de lo que haga falta.

 

3.- Si ya el año pasado el guión lo calificaba de “algo flojo” (http://www.cinepastor.es/Goyas%202015.htm) este año, sin duda alguna, ha sido flojísimo. Según los créditos ha sido obra de Dani Rovira, J. J. Vaquero, Iñaki Urrutia y Sonia Gómez.

 

4.- Dani Rovira presenta por tercera vez la gala. Esa obligación de resultar siempre gracioso es una losa. Su presentación inicial de 14 minutos (22:23 a 22:37) se hace excesiva, más sus intervenciones posteriores (zapatos de tacón, megáfono, Penélope Cruz, Belén Cuesta, Karra Elejalde…) y esto evidentemente está en relación con las tres horas. Aprovecho para hacer mención a los anuncios previos a la Gala que se han emitido y que son obra de Leticia Dolera donde Dani Rovira, en el sofá de un psiquiatra, trata de asumir su rol de presentador rodeado por actores/actrices que literalmente se le echan encima. Muy acertados. En mi opinión, el mejor chiste de Rovira es cuando “confunde” a Agustín Almodóvar con Alfred Hitchcock: “muy buena la de Psicosis”.

 

5.- Dani Rovira y la política. Más comedido que el año pasado no han podido evitar (los guionistas supongo) la “obligatoria” mención al nuevo presidente estadounidense Trump: “poquito de bajón”, “que sepas que en España la palabra cine se escribe con i latina”. Francamente creo que estas referencias sobran y más tratándose de un dirigente extranjero elegido de acuerdo a sus fórmulas democráticas. Nos guste más o menos, es así. Supongo que la mención a los Mossos de Esquadra no les habrá hecho ninguna gracia (cuando está hablando con Roberto Álamo y su papel de policía violento…). En el Auditorio se encontraban presentes el Ministro de Cultura y la Alcaldesa de Madrid y se les ha hecho un vacío total (luego en el discurso de la Presidenta de la Academia se les menciona). No está bien. El hecho de que los políticos no hayan, como acertadamente indica Dani Rovira, dedicado tiempo a la cultura en sus discursos electorales y debates no debe ser impedimento para ser educados, respetuosos y demandar (en los foros adecuados) lo que sea preciso (aprovecho para pedir al gobierno la bajada del IVA cultural del 21% al 4% sin esperar a que el déficit haya desaparecido porque esto sería esperar a que los cerdos vuelen…)

 

6.- El discurso oficial de la Presidenta de la Academia Yvonne Blake y del Vicepresidente Mariano Barroso es acertado. Son ocho minutos de repaso de la situación actual y de plantear justas necesidades (aunque no se han atrevido a pedir de forma directa una bajada del IVA, lo han hecho de forma indirecta). Barroso habla de la diversidad, de nuestra fuerza y riqueza (de toda la comunidad iberoamericana). A Barroso se le notaba tremendamente nervioso cuando apuntaba a cuestiones políticas. Su explicación de los ingresos de taquilla (605 millones de euros), iva ingresado por el “Estado” (105 millones) y dinero dedicado por el gobierno al Cine (77 millones) no “llega” a los espectadores. Acertadísimo cuando dice que:

 

“La taquilla no es la única referencia para medir el valor de una película, hay otro tipo de cine que gusta y que abre nuevos caminos, su rentabilidad es distinta, pero también es necesaria, es la rentabilidad de la cultura, del conocimiento y de la identidad” (Mariano Barroso)

 

Barroso solicita a las fuerza políticas (y lleva muchísima razón) un Pacto de Estado por el Cine (ver “Nuevas Conversaciones de Cine Español. 2016”: http://www.cinepastor.es/Conclusiones%20definitivas.htm). Yvonne agradece a TVE que el año pasado se emitieran 629 películas españolas (70 en La 1 y 559 en La 2). Esta es una de las funciones de la televisión pública.  

 

7.- Me quedo con el irónico, y acertado, discurso de Juanjo Giménez al recoger su premio al mejor cortometraje “Timecode”: “dar las gracias a la Academia por permitir que los largometrajes compartan la Gala con nosotros”, “animar a los largometrajistas porque muy pronto, quizás, puedan dar el salto…al vacío”. Y con la canción a capela de Silvia Pérez Cruz de su tema ganador del Goya por “Cerca de tu casa”… “es indecente gentes sin casa, casas sin gente” (aunque cuidado con las generalizaciones)

 

8.- Ni pizca de gracia las bromitas de Manuel Gómez Pereira y Fernando Colomo sobre el Premio-Goya de Honor a Ana Belén. Más acertado José Luis García Sánchez con eso de que “han buscado a tres directores jóvenes” para entregar este premio.

 

9.- Ana Belén Goya de Honor. Auditorio puesto en pie. Su discurso de agradecimiento suscitó en Twitter numerosas bromitas por su duración (duró 8 minutos y 40 segundos). Asusta cuando se ven varios folios para leer. Si se piensa bien tampoco es para tanto; “resumir” más de 50 años de entrega al Cine, al Teatro, a la Televisión no es fácil. Evidentemente es sólo mi opinión pero no comparto, ahora, este premio. Es cierto que Ana Belén ha sido y es una grandísima actriz pero creo que hay otras personas que lo merecen antes: Jorge Grau, Julio Diamante, Román Gubern, Jesús García de Dueñas….

 

10.- Muy bien lo de interpretar cuatro fragmentos de las cuatro bandas sonoras nominadas (en España tenemos excelentes músicos)

 

11.- Aunque sea la primera vez que un español va a presidir el Jurado de Cannes 2017 (Pedro Almodóvar), lo cual evidentemente es una gran noticia y ya iba siendo hora, el hecho de que se le de tanto bombo, tantos aplausos por parte del público es un poco, digamos, triste. ¿Cuántos franceses han presidido San Sebastián? ¿Aplaudieron en los César?... De alguna manera es engrandecer en demasía a Cannes (lo que le faltaba a los franceses) y empequeñecer a nuestros Goya. Ya sé que no es lo mismo pero…

 

12.- ¿A qué viene lo del beso de Dani Rovira y Karra Elejalde? ¿Y el beso de María Barranco y Andrés Velencoso? Me sobran. Transmiten una falsa artificialidad que consigue, justamente, el efecto contrario. Si fueran reales, auténticos, si salieran del corazón en un momento de euforia, con naturalidad, serían maravillosos, pero así de falsos…

 

13.- Muy mal cómo se ha “incrustado” el homenaje a los fallecidos en 2016. Este momento, que debería ser, motivo de sincero reconocimiento por parte de todos, se ha ubicado inmediatamente detrás de unas bromas de Dani Rovira, Karra Elejalde y Antonio de la Torre con megáfono en mano. Da la sensación que es un mero trámite que no saben muy bien donde encajar, dándole, de verdad, la importancia que merecen. Me ha llamado la atención que no se ha oído ni un solo aplauso durante la aparición de los nombres que se han reservado para el final, cuando aparece el último rostro. Desde siempre se sabe, y se entiende, que los nombres más conocidos reciben más aplausos mientras que los menos conocidos reciben menos o ninguno. Es así. Bien, al mismo tiempo, esa magnífica interpretación al violonchelo de Iagoba Fanlo del tema “Cant dels ocealls” que tan maravillosamente interpretaba Pau Casals.

 

14.- Horrorosa esa canción de Víctor Manuel “Porque somos lo que somos” interpretada por Manuela Vellés y Adrián Lastra. Pero más que por la canción, que también era pésima, por como se ha “colocado” en la Gala (casi al final). Está ya muy visto el juntar los títulos de diferentes películas en un mismo texto. Ha sido un pegote que ha quedado de pena. El problema es que soltar de golpe una canción, sin venir a cuento de nada, te deja descolocado. Los comentarios en Twitter eran demoledores. Ignoro de quién ha sido la idea pero se ha lucido. Quizás si se hubiera ubicado más al inicio…

 

15.- Y no puedo dejar de nombrar el ridículo traje del director de la orquesta Constantino Martínez-Orts en plan Matrix. Cuando se quiere llamar la atención recurriendo a elementos externos hay algo que me chirría.

 

En mi humilde opinión si la ceremonia de los Goya tuviera un mejor guión y se recortaran muchos flecos innecesarios tendría, sin duda, mayor aceptación entre los espectadores. Una duración de dos horas, de 22 a 24 horas, sería muy aconsejable. Y se puede hacer.